Hace casi tres años tuvimos la oportunidad de ir al Baby Spa de Madrid con el Cuarto para probar sus servicios de hidroterapia, tal y como podéis ver aquí y sabía que con La Quinta quería volver a repetir la experiencia porque fue fantástica.
En esta ocasión, me quiso acompañar la Cuarta para ver a su hermanita.
El centro situado en pleno centro de Madrid es muy especial pues en él se respira un ambiente de calma y relax total gracias no sólo a la decoración y la música que se oye de fondo, sino sobre todo a la manera pausada de trabajar de las fisios. Es todo tan bonito que a una le da la sensación de estar como en un sueño y creo que es algo que los bebés notan pues suelen estar muy relajados también, o al menos ,salen así.
Antes de comenzar cualquier tratamiento, se rellena una hoja con sus datos personales y, una vez dentro, se les pesa a los bebés cada vez que van para ir viendo su evolución y poderle dar un flotador adecuado.
Para la hidroterapia, se sumerge al niño en una piscina si tiene más de dos meses y todas las vacunas en regla y, si son más pequeñitos, en lo que podéis ver a continuación que es individual y cuya agua se cambia después de cada uso. Todo el agua que utilizan se purifica con rayos ultravioleta.
Para evitar que se hunda el bebé, se utiliza un sistema muy innovador patentado por ellos en la Unión Europea que son estos Bubbys que se ajustan perfectamente a su cuello, como podéis ver. Es muy divertido verles moverse, disfrutar y calmarse también en este agua calentita dónde están unos 10 minutos.
Como véis, las instalaciones están cuidadas al detalle, una gozada. En cuanto les sacan del agua, les secan en estos cambiadores dónde proceden a hacerles un masaje anti-cólicos relajante.
Con estos móviles de cuna consiguen llamar su atención, al igual que con otros juguetes específicos que, además, se pueden comprar luego en el propio centro, si a uno le interesan.
Todo el proceso está siempre realizado por fisioterapeutas cualificadas, lo cual da mucha confianza pues sabes que están en manos expertas para tratar a tu mayor tesoro.
Es importante empezar estableciendo contacto visual para así guiar el masaje. Esta postura de contraer las piernas contra el pecho es perfecta para liberar posibles gases, algo que podemos hacer en casa también.
Para el masaje utilizan aceite de semillas de uva procedente de Sudáfrica inoloro y que les relaja mucho tras el bañito. Así mejorar su flexibilidad y van ganando consciencia de su propio cuerpo.
A muchos bebés no les agrada estar bocabajo, pero también es necesario ver cómo sujetan el cuello que, en nuestro caso, me quedé muy contenta porque yo pensaba que no lo tenía muy trabajado y me dijeron que, al contrario.
El ver su reflejo en este llamativo espejo de este cangrejo tan simpático es un buen ejercicio que les suele gustar mucho, aunque Rocío estaba ya un poco cansadita por entonces y con hambre, pero el trato amable y paciente de la fisio le ayudó mucho.
Existe una cómoda y agradable sala de lactancia para poder alimentar a tu bebé de una forma muy íntima, cosa que se agradece mucho.
Baby Spa ofrece también otros servicios para bebés como fisioterapia respiratoria infantil, muy recomendable si tu bebé tiene bronquitis o asma, sobre todo.
Tras nuestra visita al centro, Rocío durmió mucho esa noche (igual que me pasó la otra vez), debió acabar agotada del ejercicio en el agua, así que lo recomiendo mucho para todos los papis y mamis que estén en Madrid.
En definitiva, nuestra experiencia en el Baby Spa fue muy positiva, igual que la otra vez. ¡ Lástima que no estén en Barcelona para poder ir más a menudo!
