Ahora que ya hemos visto a nuestros peques bañarse en bañerita, en la piscina y en el mar, toca volver a la tierra con la vuelta al cole y por eso en el post de hoy os presento nuestro picnic en el bosque con bebés o baby picnic gracias a las delicias de Pucha de Celix factory y a los mordedores de Baby Cord.
Ya os he hablado en alguna ocasión de las cosas tan ricas que prepara Pucha, pero sobre todo, aptas para celiacos y otras alergias alimentarias. En este caso, nosotras no padecemos de nada, pero elegimos sus productos por su rico sabor: unos pastelitos de atún impresionantes con un mayonesa casera que hice yo y una refrescante mousse de limón con chocolate para celebrar los 31 años de una servidora de paso, todo sea dicho.
Dos productos muy diferentes en colores, sabores y texturas, pero con un denominador común: el sabor. Si buscáis tartas, repostería o cátering sin gluten podéis encontrarla aquí en su página de facebook o consultar el post que escribí sobre tartas sin frutos secos de cumpleaños. Su especialidad: el carrot cake. No hay quién se resista!
Parecen cupcakes dulces quizás, pero en realidad no lo son, pero eso sí, están igual o más de buenos que éstos. Muy esponjosos, como toda la repostería de Pucha y con un sabor totalmente inesperado.
No me digáis que no es bonita…sencilla, pero con mucho amor combinando un cítrico como el limón con el chocolate. Perfecta para el veranito pues es ligera y dulce,pero no en exceso.
Ese día Gi decidió que Oli iba a empezar con el baby led weaning y aquí está la muestra glamurosa de un trozo de plátano chuperreteado con un pedazo de mousse 😉 ya veréis luego en el vlog específico sobre blw cómo se ponen nuestros dos peques.
LLevo vestido de punto de Tetatet del que ya os hablé hace unos meses en un post porque me permite dar el pecho y collar de lactancia.
El Cuarto aquí descubriendo lo divertido que era el mordedor con forma de cordón umbilical de Babycord. Un juguete que permite reforzar el vínculo madre-hijo recordándole la sensación de cómo era tirar del mismo dentro de nuestro vientre. Ya os hablé en una ocasión de cómo me llamó la atención este mordedor único. Es bueno para usarlo desde que son capaces de sujetar objetos en torno a los 3,4 meses aproximadamente, pero es especialmente útil una vez están con la salida de los dientes para aliviar sus encías. Lo podéis encontrar en dos modelos en su web: turquesa y rosa. Un regalo original y útil dónde los haya.
Diego va con conjuntito de pantalón, camiseta y babero de Petit Oh. Esta marca barcelonesa con unas prendas suaves como ninguna, de verdad…increíble el tacto que tiene y con un diseños clásicos que me encantan, aunque éste, en concreto con las estrellitas le daba un toque un poco más moderno. En realidad se puede usar tanto de pijama como para salir a la calle de lo cómodo que es.
Aquí probando a dar patadas bien cómodo y con uno de sus juguetes preferidos.
Fue, sin duda, un gran picnic para todos.
Aquí Gi sirviendo más limonada casera que hicimos para acompañar estas ricas ensaladas y la repostería de Celix factory.
Parece un mojito, lo sé, pero os aseguro que antes de ir a recoger a los niños al cole, no me lo podía permitir 😉 eso sí, todo riquísimo y fue una gran escapada en el bosque con los peques que seguro nos piden repetir cuando sean mayores.
