¿Dónde están mis llaves de casa? matarile, rile, rile, ¿dónde están, por Dios, mis llaves? matarile, rile, ron, chim-pón! Eso es exáctamente lo que me he estado preguntado toda la dichosa mañana.

No os creerías si os dijera que yo hace cosa de tres años, es decir, antes de engendrar a mis churumbeles, era una persona muy organizada, ordenada, metódica..y hasta un poco neuras para algunas cosas,¡ se podría decir! pero es que desde que soy madre me estoy convirtiendo cada vez en una persona más desordenada, caótica, con memoria que ríete tú de Dori..y ¡¡no quiero!! me niego a convertirme en lo que siempre he visto en mi madre (que la quiero mucho, pero es muy despistadilla), pero ya no sé si esto tiene remedio. ¿Vosotr@ creéis que sí?

Hoy era una mañana importante pues era el debut de El Menor en la guardería. Tras darle muuuchas vueltas y porque las circunstancias han hablado por sí solas he decidido meterle medio día en el mismo sitio que El Mayor. Que bueno, de mediodía tiene lo que yo de calamar por decir algo porque son dos horas y media que entre que vienes y vas son dos horas, pero yo con eso estoy más contenta que unas castañuelas porque así espero poder buscar trabajo intensamente, cosa que hasta ahora me resultaba imposible.

El caso es que esta mañana se me pegaron un poco las sábanas..es lo que tiene ser una dormilona empedernida obligada a que su sueño se vea constantemente interrumpido por los despertares de El Menor. Salimos tarde de casa, con el Mayor de morros ( ya no recuerdo ni por qué exáctamente, creo que no se quería peinar) con los dos uniformados todos monos (sin tiempo para fotos, lo siento, hermanos míos, las fotos llegarán, pero no hoy), dos mochilas, dos abrigos, mi bolso, mi abrigo y un saco tipo «me voy a la mili» con el material de El Menor para empezar su gran aventura: pañales, toallitas, un puzzle, fotos, cuentos de tapas duras, muda, bolsa del chupete, taza..lo dicho, que se iba a la mili, sólo que como todavía es pequeño, la bolsa se la llevaba su santa madre. Tiempo al tiempo. Ya la cargará él algún día.

He salido de casa corriendo, como de costumbre pues esto de tener hijos en mí equivale a llegar tarde a todas partes. Llego al coche, quita abrigos, plega carrito, mete a niños en sus respectivas sillitas; lo mismo, pero al revés al llegar al cole. Dejo al Mayor enfadado y al Menor haciéndole gorgoritos a su nueva profe (qué criatura más inocente, mi hijo..). Me voy muy apenada porque no ha derramado ni una lágrima por mí. ¡ Qué duro es esto de la maternidad!, pienso mientras me voy corriendo para aprovechar mis dos horas de «libertad». Aparco en doble fila en la farmacia que me había quedado sin vitaminas de la lactancia que jolines los caras que son, qué rabia me da..voy a casa silbando muy contenta mientras me recreo con las bonitas avenidas de árboles con sus colores otoñales..laralalaaaa.Aparco, salgo del coche y, ¡anda, pero si no encuentro mis llaves de casa! y ahí es cuando empiezan las maldiciones y me viene a la mente la famosa canción..¿Dónde están mis llaves?, matarile, rile, rile, ¿dónde están mis llaves?, que aparezcan por favorrrr!!!  Reviso el coche de arriba abajo. Ni rastro. ¡Ya está!, pienso, me las he dejado en el bolsillo del MacLaren aparcado al lado de la clase de El Menor. Si es que hay que ser muuuuy tonta para hacer eso. Aún así yo juraría que lo había revisado y que no había dejado nada, pero oye, que todo puede pasar en esta vida.

Me preguntan ahora mis hermanos a mediodía que qué tal mis dos horas de «libertad» y les digo que muy bien, que me las he pasado sentada en una cafetería acordándome de las llaves, matarile, rile, rile. Porque a ver, ¿ qué iba a hacer yo: volver a la guardería y llegar casi a las 11 y luego recoger al niño a las 11.50? pues no, señor, ya me quedaba yo desayunando tranquilamente en mi primer día de dieta en una suculenta cafetería, ¡dí que sí! ¿Tentación? ¡qué va, hombre! ( los mejores muffins de chocolate que he probado en mi vida, por no hablar de las ensaimadas rellenas de chocolate o los croissants de mantequilla pura). Total, que tras unas llamadas y whatsapps, me he vuelto al cole deseosa de encontrar mis llaves. Cual ha sido mi sorpresa cuándo he visto que no estaban allí…..Me he vuelto a casa ansiosa esta vez de ver si me las había dejado tiradas en el suelo del parquing o qué se yo! y entonces me he encontrado con un cartel pegado a la puerta del garaje y en seguida he sabido que iba dirigido a mí. La verdad que me esperaba algo del tipo: «Con M de Madre es Ud. idiota, se ha dejado las llaves. Ya le vale», pero era mucho más educado «Alguien de este bloque se he dejado sus llaves. Soy la vecina de arriba. Llámame». Corriendo que la he llamado y a las dos horas las he recuperado. La verdad que ya me veía esperando en el portal de casa hasta las 10 de la noche con los dos churumbeles esperando a que Con P de Padre apareciera. Suerte que hoy estaba la señora de la limpieza que me ha abierto pensando que estaba loca.

¿Queréis saber dónde estaban mis llaves? en el fondo del mar, no!! pero dice la vecina que el de la caldera se las ha encontrado no se sabe dónde..menos mal que todavía hay gente buena porque si no, me veía en el fondo del mar, pero bien profundo buscando mis llaves con su llamativo y monísimo llavero de un topo gigante cuyo objetivo es ser visible. ¿ A vosotr@s os ha pasado esto alguna vez? ¡¡decidme que sí!!!

María

6 Comments on ¿Dónde están las llaves?matarile,rile,rile

  1. Scan KanDy
    12 noviembre, 2012 at 9:58 pm (11 años ago)

    Jajajajajajajaja que buenooooo 😀

  2. batallitasdemama
    12 noviembre, 2012 at 10:28 pm (11 años ago)

    Menos mal que las encontraste gracias a la vecina, porque si no yo me comería el coco con que alguien podría entrar en casa. Un beso

  3. Con M de Madre
    14 noviembre, 2012 at 6:32 pm (11 años ago)

    La verdad que en medio de la vorágine ni me dió tiempo a pensar tan lejos, pero sí, menudo miedo…

  4. Con M de Madre
    15 noviembre, 2012 at 3:08 pm (11 años ago)

    ¡QUé honor que me menciones! hace tiempo ví un vídeo en el que salías tú y Miriam Tirado y Louma ,creo y me gustó mucho tu idea de bloggear como papi de dos nenes. Encantada de tenerte por aquí!

  5. Jenni Peña
    18 noviembre, 2012 at 2:41 am (11 años ago)

    Ay no habia visto este post. Y me he reido un ratico contigo. Ya veo q no soy la unica s la q le pasan cosas para no olvidar el dia.
    Y es q nos pasa x ir siempre corriendo.
    Besos apretaos.