Creo que muchos de nosotros a día de hoy compramos todo tipo de artículos y servicios por Internet, quizás al principio con algo de miedo, pero luego nos vamos acostumbrando. A raíz de mi prolongado reposo durante el embarazo de La Menor tuve que empezar a confiar ciegamente en este tipo de compras, pues me solucionaba la vida. Así, pasé a ser la típica que sólo se atrevía con los billetes de ave y vueling a adquirir desde fruta, verdura y carne ecológica a ropa infantil pasando por pañales al por mayor , fundas de carrito ,vallas para camas o planes de fin de semana. De hecho, esto de comprar por internet es un vicio (cuando haces pop, ya no hay stop!). Sin embargo, creo que no soy la primera ni la última a la que la han timado y esto es de lo que os quiero hablar hoy precisamente.

No se puede partir de la base de que todo el mundo ofrece unos servicios buenos, leales y de calidad en el mundo real, pero menos aún en el mundo virtual. He oído de casos de estafas de gente que compraba una Play Station, por ejemplo y le enviaban la caja y al abrirla se encontraba con una foto de ésta. Imaginaros la cara de tonto que se le queda al comprador en cuestión..Bueno, pues no hace falta irse tan lejos porque, desgraciadamente, yo y unas cuantas amigas hemos sido víctimas de un timo, estafa o compra engañosa.

Todo empezó cuando conocí a través de Twitter a una tal «las tijerasazules» (@tijeras_azules) , una chica que parecía tener muy buena mano con la costura y hacía unos modelitos ideales para bebés y niños. Dado mi afán de vestir a mis tres hijos iguales a bajo coste, decidí embarcarme no sólo en la aventura de encargarle los conjuntos para los días festivos de Navidad de mis tres peques, sino que, confiando ciega y absurdamente en esta perfecta desconocida y fiándome erroneamente de ella, creé un chat al cual invité a todas mis amigas mamás y os puedo decir que éramos unas cuantas.

Al ver las fotos de los conjuntos que hacía este señora gallega con tres hijos como yo, no pude al menos emocionarme y volver a la idea de que mis niños fueran ideales vestidos las Navidades pasadas y todo por un módico precio, quizás demasiado barato para ser cierto. Emocionadísima, empecé a comprar calcetines, leotardos, zapatos y lazos a juego gastándome al final más dinero en complementos que en la ropa en sí. Tuve que aprender también el mundo de la costura a lo Sira Quiroga en «El Tiempo entre costuras» comprándome un metro y midiéndoles que si sisa, hombro y otras medidas complicadísimas totalmente nuevas para mí.

Viendo el potencial de esta persona, me ofrecí, incluso a «apadrinarla» por así decirlo en el mundo 2.0 y real y darla a conocer a todos mis contactos. A ella le pareció bien y quedamos en que me regalaría un vestidito para mi hija a juego con capota a cambio de hablar de ella en un post, cosa que se hace mucho hoy en día. Tan impresionada se debió quedar con todas las amigas que le presenté en el grupo de Whatsapp que me dijo que por cada seis prendas encargadas, me llevaría una de regalo. Teniendo todas mis amigas un mínimo de tres hijos, pensé que tendría armario asegurado para mis niños durante una buena temporada. Sin embargo, empezaron a fallar cosas, pequeños detalles que chirrían y que intentas pasar por alto, tu instinto al que haces caso omiso..y luego las cosas se complican y pasa lo que pasa.

Esta chica es peluquera, por lo que la costura es para ella un hobby, no un modo de vida, por lo tanto, se conectaba al Whatsapp con muy poca frecuencia, cosa que puedes llegar a entender por su profesión. Su marido, en cambio, en el paro, debía disponer de más tiempo, ya que le ayudaba con la tricotera y le hacía jerseys, chaquetas, toquillas..todo lo de punto, vamos. Quizás yo soy de las machaconas de Whatsapp que no dejo respirar al otro y les puedo agobiar, pero estaba muy emocionada con este «proyecto», lo reconozco. Hasta le animé a abrirse una cuenta en facebook para así linkarla en mi post y que tuviera más visitas y consecuentemente, encargos.

La verdad es que todo esto pasó a principios de diciembre, con lo que tampoco nos sobraba el tiempo para encargar varios conjuntos de Navidad para mis hijos. Mis amigas empezaron a encargarle cosas y yo empecé a preguntarme si le daría tiempo a hacerlo todo, pero ella no dijo que no en ningún momento, así que aún no entendiendo de dónde sacaría tiempo para coser tanto teniendo tres hijos y un trabajo frenético, confié o mejor dicho, confiamos todas en ella. Craso error..

Es cierto que tardamos en darle las medidas que ella nos pedía y que se hicieron muchos encargos tarde, pero aún así, ella tendría que haber sido franca y habernos dicho lo que era factible y lo que no y habernos parado un poco los pies si es que no podía acapararlo todo. Supongo que ella vió un filón en nosotras y no nos quiso decir que no.

Ya en el grupo de Whatsapp nos dijo que si le podíamos adelantar parte del importe del pedido y gastos de envío, cosa que me pareció de lo más normal pues así no tenía ella que adelantar un dinero  para la compra de materiales y, fundamentalmente, se aseguraba de que la pagábamos. Nos contó como ejemplo la historia de una cliente que la hizo un encargo por un importe altísimo y luego no quiso recoger, cosa un tanto extraña que aún me cuesta creer. Todas reaccionamos muy solidarias con ella y hasta le dijimos que le iríamos comprando poco a poco entre nosotras algunas prendas que se había quedado ella. Esto es lo normal en gente  con educación y que empatizan y quieren ayudar a un desconocido.

Yo decidí hacer una transferencia de todo el importe del pedido porque una vez en Madrid, no quería andar de bancos, así que, me fié de ella y le pagué todo. Es cierto que ella me había pedido un ingreso porque así le iba mejor, pero me equivoqué en el banco, no lo supe hacer bien ,pero bueno, el caso es que lo recibió. Se me olvidó incluir los gastos de envío, lo reconozco, por lo que el mismo día que viajaba a Madrid me escapé al banco corriendo en medio de hacer maletas para cinco para que así ella tuviera todo su dinero.

Ya estaba acostumbrada a no recibir contestación en Whatsapp o recibirla días más tarde, cosa que me mosqueaba un poco, francamente porque aunque estés muy liada, si esto es un negocio para tí, lo lógico es que le dediques tiempo e interés, cosa que ella demostró muy poquito. Tenía yo tanto interés en asegurarme de que había recibido el dinero que hasta la llamé, cosa que hasta entonces no había hecho nunca porque siempre habíamos hablado vía Whatsapp. Cuál fue mi sorpresa al ver que su número tenía las llamadas restringidas. ¿ Por qué motivo podría alguien tener las llamadas restringidas? es raro..sí..muy raro, que queréis que os diga. Puede que quisiera separar su vida personal de la laboral, pero entonces das otro móvil para que te llamen. Le pedí un teléfono fijo de contacto para poder hablar y asegurarme de que había recibido el dinero, pero ella no quiso dármelo en ningún momento, no me dió ninguna explicación. Era un situación un tanto extraña la de perseguir a la persona que me vendía algo a mí cuando tendría que ser, precisamente al révés. Aún así, seguí en el ruedo pues llevaba semanas muy emocionada con este asunto.

Viendo que yo necesitaba los conjuntos para nochebuena y que por entonces estaría en Madrid y viendo que los pedidos iban muy justitos, le dije que me los enviara a casa de mis padres para así ganar un poco de tiempo. Preguntando al conserje cada vez que salía que si había un paquete, así me pasé el 23 y 24 y 25 de diciembre. Y nada. Ahí me quedé yo con mi cara de panoli. Mi estress fue máximo porque me quedaba, por lo tanto, sin nada que ponerles para esos días, suerte que una es previsora y echa siempre unas camisas blancas y un pantalón azul marino que eso queda bien con todo porque si no..Lo peor de todo fue la ausencia de noticias suyas durante estos días. Eso me carcomió esos días en los que tenía que haber estado contenta de estar en familia, lo reconzco. ¡ Qué tonta fui!

Entonces, a dos amigas mías ya les habían ido llegando sus paquetes. A la primera, le iba todo pequeño, no podía utilizar nada; a la segunda, tres cuartos de lo mismo. También malgastaron un dinero en complementos y tuvieron que recurrir a otros modelitos para sus hijos en señaladas fechas. Pero ellas, al menos, habían recibido algo, aunque no les valiera. ¿Por qué yo, que les había proporcionado este contacto, no recibía ningún mísero paquete? Finalmente conseguí una pobre e increíble explicación por parte de esta señora, de nombre Tere, que decía que le habían devuelto el paquete y que le habían robado parte del contenido. Pero vamos a ver, ¿desde cuando se roba sólo parte de un paquete y no todo, hombre? Encima ella estaba enfadada porque decía que así había perdido dinero y me aseguró que pondría el grito en el cielo al servicio de mensajería. En ese momento yo ya estaba muy cabreada y le dije que lo sentía, pero que me devolviera el dinero, pero ella me dijo que eso no podía ser porque ella ya había hecho una inversión y no podía perder nada, así que ilusa y tonta redomada que soy, le dije que si me lo volvía a hacer rápido, que me lo mandara tarde aunque fuera y así lo intentaría aprovechar para fin de año y reyes.

Y sí, recibí mi paquete, señores y señoras, pero madre mía, casi que prefiero no haber recibido nada que haber recibido semejante cosa. Para empezar, llegó en una caja de zapatos cerrada con tres trozos de cinta americana. ¿Qué tipo de modista o costurera que ha gastado horas en confeccionar chaquetas, pantalones y vestidos manda su pedido así tal cual tras haberle robado su anterior paquete? Es que, a ver, no se entiende..No hay por dónde cogerlo. Si yo me tiro horas cosiendo algo, soy la primera en interesarme en que mi clienta lo reciba y le guste. Pero no, eran días de Navidad, muy liados para ella en la peluquería, así que su interés en si yo recibía o no su paquete fue nulo.

Para empezar no había ni una mísera notita de «espero que te guste», «disculpa por todo lo que ha pasado», «gracias por darme esta oportunidad y presentarme a tus amigas». Cero patatero. Sí, era mucho pedir por lo visto. Me encontré, en vez, con una pila de ropa hecha un higo con hilos colgando deshilachados que constaba de lo siguiente:

-2 pares de shorts de una tela escocesa muy mona. Se los probé a mis hijos. Unos muy pequeños y otros que se caían. No sé qué tipo de patrón tomó para hacerlos. Puede que fuera que mis niños fueran amorfos, pero es que dió la casualidad que a mis amigas les pasó exactamente lo mismo y eso que cada una tenemos peques con unas constituciones bien diferentes.

-2 chaquetes de punto azul marino, una de ellas con agujeros en la axila, todas sin ojales y sin botones, con hilos colgando y sin los bordes de las mangas rematados. Esto fue un pequeño detalle que nos comentó por Whatsapp «a mi marido se le ha olvidado ponerlos», pero cuando le recriminé que cómo se iban a abrochar así las chaquetas me dijo que por qué suponía que se tenían que cerrar, que ella en ningún momento nos mandó fotos de chaquetes con agujeros y botones. No ya, rica, pero eso se supone. Igual que se supone que la ropa lleva hilos para aguantarse, es que no sé cómo decirte..

-Un vestido de la misma tela escocesa (que yo pensé era rojo y verde por las fotos que me envió , pero cuando ella me dijo que era rojo y marrón, por no echarme atrás, aunque no me gustaba el color, le dije que ok, que me lo quedaba) con la parte de detrás sin ojales, sin botones (oh, sorpresa!!), más hilos colgando, con el bajo sin hacer, medio colgado, vamos que eso también lo hago yo casi, sabes?

-Una chaquetita de punto roja con pompones (esta de regalo por las prendas encargadas por mis amigas). Monísima, la verdad y con los acabados bien hechos, no como la otra. Al abrocharle la chaqueta, se cayeron los pompones. No debían estar muy bien sujetos, así que digamos.

Después encontré a faltar una braguita de tela escocesa que dice no me envió porque no se la pagué (pero en ningún momento me dijo que debiera hacerlo) y una capota de regalo por más prendas que le encargaron mis amigas (pero dice que finalmente no me la incluyó porque una conocida mía canceló parte de su pedido en el último momento, cosa lógica tras ver semejante ropa que le envió que no le cabía nada y eso que perdió parte de su dinero porque se lo había ingresado ya, pero viendo lo visto, no quiso recibir ya nada de esta señora)

Así tras semanas y días esperando mi ansiado paquete, me quedé tan decepcionada y triste con lo recibido que casi me echo a llorar de la rabia e impotencia. Ella seguro que se quedó más ancha que na y no le importó un pimiento. Es más, seguro que se rió por lo dentro pensando en cómo nos había tomado el pelo a nosotras tres. No sólo no me pidió disculpas en ningún momento, sino que dio la vuelta a la tortilla y acabé resultado yo la mala de la película y ella la pobre costurera. Mentirosa dónde las haya, manipuladora, mal queda..es poco todo lo que diga de esta mujer.

Vale que estamos en tiempos de crisis y la gente tenga que inventarse negocios de dónde sea, pero de ahí a timarnos a cuatro personas creo que hay un trecho. Que su marido estuviera en el paro y necesitara el dinero, lo siento en el alma, casi todos los hogares españoles cuentan con un parado entre sus miembros, empezando por una servidora.

En fin, tras apaciguar mi rabia, ha quedado un poso de decepción en mí y hasta pena por esta señora gallega que no tuvo bastante con timarnos a nosotras tres, sino a una cuarta amiga también que dijo que le enviaría un pelele para su bebé hace dos semanas y todavía lo está esperando. Pagadito que está y así se quedará viendo lo visto. Que está de mudanza dice..yo ya no me creo nada de @tijeras_azules, así que no le confiéis nada pues esta pobre mujer no cumple con su palabra y se aprovecha de la gente. Quería formalizar su negocio llamándolo algo así como «las cositas o ropita de Annette», desconfiad de cualquier cosa que se parezca a esto.

«Hay veces que la gente por pagar cree que lleva la razon en todo…piden milagros de 5 minutos», se atrevió a escribir en su cuenta de Twitter el día uno de enero. No, T., yo no pedía milagros, yo te pagué por unas cosas que no recibí o recibí en un pésimo y vergonzo estado. Que ahí pese en tu conciencia y que, tal y como te dijo mi amiga, que este año te traiga un poquito de profesionalidad.

Moraleja : antes de comprar por Internet, aseguraros de que se cumplan unos mínimos que den seriedad y autenticidad a la compra.Tened más de una vía de comunicación con esa persona (facebook, twitter, mail y móvil si hace falta), cuidado con revelar datos vuestros..en fin, que os guiéis por el sentido común que también dicen por ahí que es el menos común de los sentidos..
Pd2: se ve que tiene una cuenta personal en Twitter a nombre de @tere_loira ,desconfiad de ella…

María

12 Comments on Compras engañosas o fraudulentas por Internet

  1. Somos Múltiples
    26 febrero, 2014 at 10:58 pm (10 años ago)

    Yo lo siento, soy muy radical, pero le hubiera denunciado por estafa para pararle los pies, así de claro. Me cojo las prendas y las conversaciones de Whatsup y me planto en la comisaría, para que no se ría de nadie más. Y el día del juicio la que se ríe soy yo, por lista. De hecho, te animo a que lo hagas. Ni siquiera me creo que su marido esté en el paro ni que sea peluquera. Todo es mentira. Normalmente es gente que vive de dar palos, luego cierran las cuentas de las redes sociales, desaparecen un tiempo, abren otras y siguen haciendo lo mismo.

    Yo lo compro todo online, menos la gasolina, pero todo todo. Eso sí, siempre miro que sea un establecimiento serio; que tenga una tienda online decente, con un aviso legal identificando a la sociedad que está detrás, que tenga redes sociales y haya actividad, busco opiniones en Google… Y si tiene algún sello de confianza como el de Confianza Online mejor. La verdad es que yo nunca me fiaría de un particular que va en el plan que tú cuentas, si alguien no invierte un mínimo en su negocio es que no es un profesional y luego pasan estas cosas y nadie responde por ello.

    En cualquier caso, pobrecilla, ¡Menuda mala experiencia tuviste que vivir! ¡Qué impotencia! Por cierto, ¿Sabes que tienes un mes para revertir una transferencia? Yo eso se lo hice una vez a Gas Natural, por un cargo erróneo que me hicieron. No se si aún estarás a tiempo, habla con tu banco a ver. Ojalá tengas suerte.

  2. Preparando la llegada del bebé
    26 febrero, 2014 at 11:09 pm (10 años ago)

    Vaya tela!! Me puedo imaginar todo lo que has pasado estos días… Yo he tenido siempre buenas experiencia comprando por internet, y eso lo soy bastante asidua. No obstante, vienen muy bien tus consejos que nunca se sabe. Besos

  3. unamamabloguera
    26 febrero, 2014 at 11:15 pm (10 años ago)

    Que fuerte me parece el caso, y no me extraña tu decepción y rabia… Mira si puedes hacer algo de lo que comenta Somos Múltiples, no puede ser que se dedique a hacer ropa y que no acierte ni una sola talla y encima tan mal acabada…

  4. Lorena
    27 febrero, 2014 at 7:55 am (10 años ago)

    Doy fe, yo soy una de las engañadas. Me envió tres chaquetitas y no acertó una sola talla! Las mangas de la de mi mediano de dos años no le entraban ni a mi pequeño de uno! Cuando le pregunto que porqué las chaquetas no llevan botones me dice que por que habíamos quedado en pompones (mentira cochina) y cuando le digo que entonces donde están los pompones… ummmmm silencio administrativo. Y allí me veo la tarde de nochebuena buscando chaquetitas para tres niños que combinaran con los pantalones que ya tenía y, obviamente, teniendo que cambiar color de leotardos y demás. Un desastre. Pero algo bueno hemos sacado de todo ésto, verdad con M de Madre?, no se venden duros a cuatro pesetas…

  5. Con M de Madre
    27 febrero, 2014 at 8:35 am (10 años ago)

    Gracias,somos múltiples!de hecho,lo primero q quise es denunciar,sin embargo me han corroborado varias fuentes q si el importe es menor a 400€ no prospera la denuncia.Desgraciadamente,entre mis amigas y yo no llegamos a esa cantidad,por lo que lo único que puedo hacer es dar a conocer su estafa para que no lo haga mas.

  6. Mamá en Bulgaria
    27 febrero, 2014 at 8:52 am (10 años ago)

    Parece mentira que haya gente tan chapucera y caradura..

  7. CarolMT MT
    27 febrero, 2014 at 9:00 am (10 años ago)

    Pues yo soy la del pelele sin enviar… me siento tonta tonta tonta!! Aún ayer, intentando darun voto de confianza y queriendo pensar que puede haber pasado algo, intenté contactar con ella…pero nada…la callada por respuesta!
    El 14de febrero me dijo que mi paquete había salido con el pelele para mi bebe que nacera en Abril, a todo esto decir que le hice un ingreso hace mas de dos meses por el importe total (18€) menos mal q los gastos de envío, 6€, quedamos en q se los pagaria después, bueno resumiendo!, que el pelele, y un detallito que me dijo qmeenviaba junto con él, se ve que están dando la vuelta al mundo porque a mi casa no han llegado…
    Son 18€, que gracias a Dios no me van a hacer mas rica ni mas pobre, pero el sentimiento que se me ha quedado y la ilusión rota… eso si que me duele.
    Como le dije ayer a Con M de Madre, espero, y siento ser así pero es que estoy bastante dolida, que ese dinero que se ha metido en el bolsillo engañando y jugando con nosotras, se lo gaste en medicinas!!, aunque sea en termalgines!! Que estoy enrabietada pero aún así YO si soy persona y buena gente, pese a que por ahí haya gente que solo piensa en hacer malerias y tomar el pelo a las personas de buena fe.
    Tere, ya solo espero que te llegue este post y te entre un poquito de vergüenza torera.

  8. Somos Múltiples
    27 febrero, 2014 at 9:17 am (10 años ago)

    Con esa cuantía no sería un delito de estafa, sino una falta de estafa. Lo normal es que haya un juicio de faltas (en el que no necesitas acudir con abogado) y se le ponga una mierda de multa si es condenada. Lo interesante no es la pena en sí, sino la angustia y vergüenza que va a pasar cuando reciba la citación, tenga que acudir a declarar al juzgado… etc. Seguro que se lo piensa mejor a la hora de timar a alguien más, y posiblemente con una sentencia condenatoria se le pueda pedir a Twitter el cierre de su cuenta, aunque esto último ya no se bien como funciona la verdad.

  9. Somos Múltiples
    27 febrero, 2014 at 9:22 am (10 años ago)

    Mira, el art. 263 del Código Penal:

    "Serán castigados con localización permanente de cuatro a 12 días o multa de uno a dos meses: (…) 4. Los que cometan estafa, apropiación indebida, o defraudación de electricidad, gas, agua u otro elemento, energía o fluido, o en equipos terminales de telecomunicación, en cuantía no superior a 400 euros."

  10. Alba de Ya estoy Aqui MaMa Campanilla
    27 febrero, 2014 at 8:33 pm (10 años ago)

    me parece muy fuerte.

    esto lo retuiteo del tirón.

    gracias por publicarlo. viene bien saber estas cosas. la pena es que pagaran justos por pecadores porque esto ya hace desconfiar.. a mi al menos me pasa.

    besos guapa.

    que poca vergüenza.

  11. Marta Perez
    28 febrero, 2014 at 8:07 am (10 años ago)

    Qué fuerte, lo he leído de cabo a rabo, sin entender como puede haber gente así. Encima que se le hace publicidad, se le dicen las cosas bien, y coñe, que es un detalle y una cosa deseada, que se espera un mínimo de compromiso.

  12. Marta Perez
    28 abril, 2014 at 7:58 pm (10 años ago)

    Has sabido algo más???