El post de hoy es a petición de mi vecina Cris que dice que le pica mucho la curiosidad por saber cómo lo hacemos en casa para que nuestros hijos se acuesten cada día del año prácticamente a las 8 de la noche. Tengo que advertir que esto no es un post patrocinado por Melamil (gotitas que favorecen la conciliación del sueño que muchas madres conocemos y habremos usado a temporadas quizás con alguno de nuestros hijos)

Supongo que muchas cosas que uno hace con sus hijos son porque esa persona lo ha vivido en su infancia. Puede ser que queramos evitar todo lo contrario como, por ejemplo, yo soy muy tiquismiquis con la comida e intento que mis hijos prueben de todo para que no sean como yo. Pero, por lo general, yo al menos quiero repetir muchas cosas que mis padres hicieron con nosotros siete. Una de esas es el hábito de acostarnos pronto. Cuando eres una familia numerosa no te queda mucha opción: o hay orden y disciplina o puede ser un auténtico caos (y aún así, hay muchas veces que ya hay mucho caos).

Ante todo quiero dejar claro que no pretendo asentar cátedra, evidentemente ni dar consejos a nadie. Simplemente os voy a contar lo que yo hago, por si a alguna pudiera servirle de algo. No quiero herir ninguna sensibilidad ni que nadie se dé por aludida porque no es mi intención.
Gracias a la charla de una profesora que el Mayor tuvo en p2, una grandísima profesora, por cierto, firme, pero a la vez cariñosa, descubrí en mis inicios como madre, la importancia de las rutinas que dan seguridad a los niños. Cada niño desde p2 es perfectamente capaz de quitarse sus zapatos, colocarlos en un sitio que tú hayas establecido, colgar su mochila y abrigo y lavarse las manos. Quizás a principio de p2 cuesta. Evidentemente si hay hermanos mayores que hacen lo mismo, eso siempre ayuda. Si es tu primer hijo, quizás te estás varios meses o todo el curso completo repitiendo cada día las mismas rutinas hasta conseguir que tu hijo lo haga, pero vale la pena acompañarle en este proceso para que, al final, acabe haciéndolo sólo.
No infravaloremos a los niños. Ellos son perfectamente capaces de hacerlo, les va muy bien tener pequeñas responsabilidades y así, además, tú no tienes que andar enfadada recogiendo sus cosas y haciendo que en el día de mañana sean personas que no contribuyan a unas tareas mínimas en sus respectivos hogares.
Pues veréis, lo que yo hago es que al llegar a casa del cole me pongo cómoda y mientras cada niño hace lo propio , bajo las persianas de nuestros cuartos que no del resto de la casa,ojo.Ya sé que los niños no son tontos y saben diferenciar el día de la noche No pretendo engañarles,pero ayuda. Es algo simple que a mí me funciona. Así contribuye a dar la sensación de que el día se está acabando y que «toca» dormir. Así que juegan un ratito en el salón, una hora como mucho o el Mayor lee un poco o hace algún dibujo (sus primeros «deberes») . Después toca recoger juguetes (el momento más difícil, sin duda, pero muy necesario también). Luego a las 6,30 empiezo baños y a las 7, cenas. Tengo que decir que mis hijos meriendan en el cole entre 3,30-4, por lo que no les doy nunca merienda y así cenar a esa hora me parece muy razonable. Si alguna vez vienen especialmente hambrientos del cole ellos ya saben que pueden tomarse una fruta o un vaso de leche, pero nada más.
Es cierto que mis hijos no son malos comedores, bueno, el Mediano es tiquismiquis, como yo, pero, en cualquier caso, las cenas no se alargan más de media hora desde que se sirven hasta que recojo todo. Y sí, sería mejor cenar todos en familia, pero mi marido llega tarde cada día, así que le espero yo para cenar y aprovechamos los fines de semana para comer juntos. Muchas veces ceno yo con ellos ,si voy a su ritmo. Parece raro, quizás, pero si comes a la vez que un hijo bebé que tienes en casa a las 13h, pues a las 7 cena es perfecto para mí y así no me voy a la cama tan llena además.
A las 7,30 se lavan los dientes que es un tema que les cuesta, pero hay que insistir. Una vez más, decir que al haber hermanos mayores, les cuesta muy poco porque todos quieren imitar a los demás y no quedarse sin cepillarse los dientes. Después pongo un pañal a La Menor y llega la hora de los cuentos. Reconozco que es mi momento de bajón. A estas alturas suelo estar muerta ya físicamente porque llevo muuucho cansancio acumulado de noches de dormir interrumpidamente durante los últimos 6 años, pero bueno, no cambio mis lactancias maternas a demanda por nada del mundo, ni siquiera a costa de ir como zombie por la vida. Creo firmemente que merece la pena ( para mí, ojo, para mí).
Aunque me encanta el momento cuento, hay veces que lo hago más rápido de lo que debiera. Hay veces que lo hago muuy cortito u otras, lo suprimo, muy a mi pesar, pero si el Cuarto está llorando con cólicos a esas horas, cosa bastante frecuente en estos tres primeros meses de vida suya, mi nivel de ansiedad no da para más. Después hacen sus oraciones de la noche y a soñar con los angelitos.
El Mayor y el Mediano duermen en sus cama nido. Hay gente que quizás duda de si al ser una familia numerosa cada uno tenemos nuestra propia cama, así que para su tranquilidad diré que sí, que el tema dormir en la bañera todos hacinados, como que no. Bromas a parte, otra cosa es que a veces colechemos con alguno, pero cada uno dispone de su espacio propio.
La Menor va a su cuarto dónde allí le cuento su propio cuento. Este sí que es impepinable, sobre todo porque desde que la desteté en noviembre (fecha que no olvidaré nunca) como os contaba en este post, necesita suplir mi cariño con este pequeño gesto. Entonces a las 8-8,15, no más de 8,30 me puedo dedicar finalmente al Cuarto. Si logro vencer mi cansancio mortal y no le he podido bañar a lo largo del día, le baño entonces porque tras probar de que sus hermanos colaboren en el bañito, la cosa acaba siendo tan estresante que no se relaja nadie con este momento que tanto me gusta acabar con un masajito.
Mis hijos no se levantan de sus cuartos una vez les acuesto, a no ser que haga mucho calor y me pidan agua o estén enfermos. ¡Qué suerte!, pensaréis quizás. Pues no sé. La verdad que como siempre lo hemos hecho así, no conozco otra manera de hacer las cosas.
Aunque no es oro todo lo que reluce. Con la Menor reconozco que me ha costado mucho llegar a ese punto pues es la que he destetado más tarde (a sus 2 años y medio) y eso se nota. Ella ha necesitado que hayamos probado varias rutinas hasta haber dado con la adecuada para que acepte dormir en su cuarto. Siempre habíamos colechado, pero una vez nació el Cuarto intenté que durmiera en su cuarto porque me agobiaba un poco con 4 en la cama y por eso le compre sus cuentos especiales de rutinas  que me recomendó su profesora. Rezo con ella de nuevo todas las oraciones mientras amamanto a veces al Cuarto si está muy desesperado y así, dejándole la puerta abierta y una luz encendida, he conseguido que se duerma sola.
Tras dar el pecho un buen rato al Cuarto en mi cuarto hasta dormirlo, llega MI MOMENTO. Aunque es cierto que, a veces, me adormece tanto estar a oscuras en mi cuarto, que me he quedado dormida hasta el día siguiente. La verdad que no aguantaría físicamente para acostarles mucho más tarde. Mis fuerzas no dan para tanto. Si sobrevivo a la tentación de no dormirme, aprovecho para ver algo en la tv o dedicarme al blog. Claro que prefiero aguantar despierta y tener ese rato para mí, pero cada día va como va y aunque pueda parecer algo estricta por estas rutinas, mi prioridad es dormir lo máximo posible y si el blog se me queda más abandonado, pues intento dedicarle un rato a mediodía mientras duerme el Cuarto.
Eso sí,a las 7am se despiertan cada día pase lo que pase.No se pueden pedir peras al olmo.De eso os hablaré la semana que viene en una sección familiar que iré engrosando.
Y eso es todo por hoy, mamis.
¿Os ha parecido útil? ,¿Vosotras sóis de acostarles pronto o tarde?, ¿Se convierte las horas de acosarse en una pesadilla? Contádmelo.

 

María

10 Comments on Cómo acostar a tus hijos a las 8pm

  1. Nueve meses Y un día después
    18 julio, 2016 at 6:39 am (8 años ago)

    Es que con 4, uno de ellos un bebé, como no lo hagas así, complicado. Eres una campeona.

  2. Con M de Madre
    18 julio, 2016 at 6:55 am (8 años ago)

    Jeje yo creo que esto es algo bueno para todos,pero si eres de familia numerosa más todavía,desde luego!;)

  3. WalkingJungle
    18 julio, 2016 at 7:15 am (8 años ago)

    Un post muy acertado! La verdad es que nosotros también somos de acostarles pronto, aunque al principio fue un dilema que tuvimos porque entonces implicaba que muchos días mi marido llegaba ya con ellos durmiendo… Pero como el mayor empezó la guarde muy pequeño, llegaba a casa muerto, así que a las 7 cena y ya a dormir. Ahora con los dos la cosa se complica más, sobretodo desde que se hace de noche trde y hace tanto calor. A ver si cuando acabe la guarde logro que sigan con las rutinas…aunque estoy mentalizada para saber que no será así ? Sobretodo el tema de las comidas. En fin, a ver que tal!

  4. Con M de Madre
    18 julio, 2016 at 7:27 am (8 años ago)

    Es cierto q con el calor y verano es mas difícil,pero bueno,no hace falta q sean las 8,vaya!pueden ser las 9o la hora q vosotros penséis q os va bien xa vuestra familia.La cosa es intentar q sea la misma durante un buen periodo de tiempo para que lo tomen como hábito.Luego esa hora puede modificarse hacia arriba o abajo según las necesidades.
    Y te entiendo,da penita acostarles cuando no esta el papa,pero a veces no hay otra opción.Siempre se puede suplir de otra manera.En el próximo post contare como lo hacemos nosotros.
    Por cierto,te llego ya tu regalo del sorteo?besos!

  5. Patricia Martí
    18 julio, 2016 at 8:33 am (8 años ago)

    Me alegro de leer este post, M de Madre!! Pensaba que era yo la única "talibán" de los horarios y las rutinas!! También tengo cuatro niños, la mayor con 4 años, y si no hay orden en casa y una rutina muy marcada, se nos escapa la situación!! Los míos también tienen el ritmo cogido, se acuestan muy temprano porque necesitan descansar y al levantarse descansados, no hay que lidiar con tantas rabietas ni malhumores! Y se consigue, no sin esfuerzo, pero acaban cogiendo hábitos no sólo en los horarios, también en el orden en casa y en la responsabilidad hacia sus juguetes y sus cosas. ¡Súper fan de la rutina! jeje Saludos a todas la mamis!!

  6. WalkingJungle
    18 julio, 2016 at 8:44 am (8 años ago)

    Siiii! Ya nos llegó! De hecho justo ayer en IG puse una foto de cómo ha quedado una de las láminas colgadas en la habitación de los niños 🙂
    Pues quedo a la espera de ese post! Un saludo!!

  7. Aprendemos con mamá
    18 julio, 2016 at 9:04 am (8 años ago)

    Sí, nosotros también tenemos rutinas. Al grande no le fue tan sencillo pero a sus hermanas sí. Les facilita aceptar el momento de acostarse y que después de tal cosa viene tal cosa. Tienen muchísima autonomía y hacen casi todo solos.

  8. Con M de Madre
    18 julio, 2016 at 9:10 am (8 años ago)

    Ah.es verdad!q chuli!me alegro q lo disfrutes!

  9. Con M de Madre
    18 julio, 2016 at 9:12 am (8 años ago)

    Que va,Patricia!creo q somos muchas "talibanas" escondidas x ahí…jeje madres de familia numerosa en su mayoría!;)
    Si,el dormir es fundamental xa q estén descansados e intentar minimizar las inevitables rabietas. Un beso,guapa!

  10. Con M de Madre
    18 julio, 2016 at 9:14 am (8 años ago)

    Exacto.Las rutinas les/nos dan tranquilidad y autonomía.No queremos hijos vagos ahora ni de mayores!Asi todos salimos ganando,verdad? 😉