Fijaos en los ingredientes que lleva cada producto. Reconoceréis todos ellos fácilmente. Ningún nombre extraño de pronunciar (clave según el libro que leí sobre sustancias nocivas, del cual ya os hablé en este post, para saber que son ingredientes saludables).
1) Gel de baño y champú: lleva aceite de coco, oliva y jojoba prensado en frío. Gracias a ello, este producto es apto para niños con pieles atópicas ( por ahora 3 de mis 4 hijos). Es bifásico y huele como a naturaleza, no sé cómo explicarlo. A mí me recuerda a una cesta de productos naturales que me regaló mi tía abuela cuando hice la Primera Comunión (imaginaos mi capacidad de acordarme de olores!). Deja el agua como turbia al añadirlo, pero con un olor muy agradable y la piel del Cuarto se queda luego suavecita.
2) Aceite corporal con jojoba: lleva aceite de onagra y jojoba. El primero es un ingrediente que ya había visto presente en otros productos de cosmética para niños, así que me voy familiarizando poco a poco con ingredientes cada vez más naturales. Yo lo uso para dar masajitos al Cuarto porque me encanta ese momento del día con él, pero en realidad, lo puede usar tranquilamente toda la familia que somos de piel sensible o atópica. Cura y da una nutrición que dura bastantes horas. Es inoloro.
4) Bálsamo reparador: esto ya es un nivel más en tema irritación del pañal, cuando el anterior producto no es suficiente pues la piel del culito de tu bebé está en carne viva casi (cosa que es muy fácil que suceda por otro lado). Entonces pasamos a este producto inoloro rico en óxido de zinc que es un polvo mineral que ayudar a sanar más rápido las irritaciones de la piel. Lleva también almidón de maíz. Como véis, todos los ingredientes son de «nombres normales» (buena señal).
5) Bálsamo de carita y labios en stick: el tamaño de este producto es perfecto para llevarlo en el bolso o bolsillo e irlo aplicando cuando veas que tu bebé o niño tiene labios secos y agrietados o mejillas rojas, secas o a veces incluso, que sangran de la sequedad como le sucede a La Menor en invierno. No huele a nada porque está hecho con ingredientes naturales y nutritivos como aceite de girasol, cera de abeja, manteca de cacao, aceite de coco y vitamina E.