Cumplía el otro día mi abuelo nada menos que 86 años cuando le llamé para felicitarle. Me contó enntonces que había tenido un sueño de lo más extraño: había soñado que estaba con sus dos hijos mayores jugando en la cama (siendo éstos pequeños en su sueño). Este extraño episodio le impactó tanto que decidió escribir […] Read more…