El post de hoy es muy ilustrativo…y ,desgraciadamente, está basado en hechos reales, tan reales como la vida misma pues el martes pasado, tuve la mala suerte de experimentar esta situación en mis propias carnes. Llegaba yo a casa a mediodía tranquilamente con el Mediano y la Menor cuando metí la llave en la cerradura y de repente me vino un olor a gas importante…abrí la puerta y una bocanada de humo gris me entró en la cara. «¿Qué electrodoméstico me he podido dejar encendido?», me pregunté en un milisegundo. Tic,tac,tic,tac. «¡¡Ninguno!!!».Tic,tac,tic,tac. «Niños, quedaos aquí que ahora vengo», tic,tac,tic,tac. Llego al salón y me encuentro la mesa de madera ardiendo con todo lo que tiene encima. Rescato de las llamas mi portátil al grito de: ¡¡nooooo!!! pensando en mi curso de community manager de la Uned, la posibilidad de escribir en mi blog más cómodamente..noooooo!!!
«¿Cómo narices se apaga esto: agua a saco?, anda, llama al vecino que él lo sabrá hacer mejor seguro»,me dije a mí misma. Tic,tac,tic,tac. «Vecinooooo, que se me quema la casaaaaa». Tic,tac,tic,tac. «Mete a los niños en mi casa», me espetó mientras salía corriendo con un trapo. «¿Qué pasa, mamá?», me inquiría el Mediano ajeno a la situación (y gracias a Dios!). «Nada,hijo,quédate aquí a ver la ruleta de la fortuna, mira qué guay!», contesté casi temblando del susto que llevaba encima.
«Abre todas las ventanas de la casa», me ordenó el santo vecino y allá que fui yo como una posesa a abrirlas.Tic,tac,tic,tac. «Dame agua y toallas», me pidió. Allá que fui a darle dos botellas de agua, pero oye, que no acababa de encontrar una toalla fea que no me importara que se quemara y echara a perder. «Esta no que es de liberty, ésta no que está bordada a mano, ésta no que está con el punto de cruz..», pensé yo en otro milisegundo por increíble que pareciera. Tic,tac,tic,tac. «Tráeme trapos, aunque sea!», me gritó el vecino incrédulo de que pudiera ser tan pava, supongo. Y así me reuní con mis hijos corriendo mientras él me apagaba el fuego como podía, llamaba a los bomberos e intentaba desconectar la alarma de incendios. Quizás sucedió todo esto en dos minutos, no lo sé, pero se me hizo una eternidad.
Cuando el vecino logró apagar el fuego, el aspecto era un tanto desolador:
Mamá en Bulgaria
22 diciembre, 2014 at 5:34 pm (8 años ago)Madre mía, lo que podía haber sido.. menos mal que estáis todos bien y sólo ha sido la mesa!
Anda que lo de las toallas.. eres la leche jaja!
nimbus nim
9 enero, 2015 at 11:32 pm (8 años ago)Hola! soy nueva seguidora (quedateenminube), me gusta el estilo de tu blog y me quedo…
Vaya susto con la entrada, menos mal que sólo quedó en eso y no fue a más…
Saludos, :))
ROSANA TELLEZ
10 enero, 2015 at 7:54 pm (8 años ago)Madre mía menos mal que no os paso nada!, una vez nos dejamos una vela encendida y la encontramos encendía por la mañana, pero claro te asustas.. me imagino vuestra situación! Un beso y un fuerte abrazo!
mamasalbordedeunataquedebesos
25 enero, 2015 at 6:59 pm (8 años ago)Madre mía qué susto! y por unas velas! a mi siempre me han dado yuyu las velas y sólo las enciendo si hay alguien siempre vigilando. Suerte que al final sólo quedó en hacer unas cuantas lavadoras y en ventilar bien la casa…qué podría haber sido algo peor!
Feliz año también y espero que no te traiga más sorpresas como ésta!
Un abrazo!