A estas alturas, creo que todas ya sabéis que me gusta más una cremita que a un tonto un lápiz y, como no podía ser menos, durante el embarazo me cuido más todavía (si cabe, y eso que es el quinto, pero eso no es excusa). En este post ya os hablaba en mi anterior embarazo de cómo se supone que una está radiante en el embarazo y yo no me sentía así, pero, sin embargo, esta vez sí que puedo decir que a veces (pasado el primer trimestre horripilus obviamente), hasta me siento guapa. Creo que eso se debe en gran medida a que estoy mucho más en mi peso de lo que he estado nunca, por lo que una se menos enorme.
Os voy a contar con productos me estoy cuidando estos meses con la gama que Mustela tiene para las embarazadas que seguro que conocéis ya y si no, ya estáis tardando, queridas porque no encontraréis unas cremas que huelan mejor y sean tan agradables de extender, un verdadero placer para tu piel.
Empecemos con las odiosas y temidas estrías, odiadas ya tanto por mí que nos hicimos amigas de ser compañeras de esta aventura llamada maternidad. Mustela ofrece dos texturas muy diferentes para tratar este problema: la crema de prevención de estrías y el aceite. A mí suelen gustarme más los aceites, pero es cierto que ahora con el calorcito que hace en verano, da un poco de pereza, pero aún así, yo insisto en aplicármelo por las noches, no creáis que esto es cuestión de paciencia y constancia. Además, el pulverizador facilita mucho el aplicar la dosis necesaria y no pasarse como hacía yo antaño.
Este aceite anti- estrías no huele a nada y eso me encanta porque no sabéis la de aceites que he usado yo desde que soy adolescente y empecé a ver con gran susto cómo las estrías asomaban por mis pechos. Tampoco mancha la ropa, cosa importante porque el aceite de rosa de mosqueta puro naranja que viene de la patagonia argentina estará muy bien y será muy bueno, pero es un destroza sábanas y pijamas y eso no se va luego ni con lejía. Este aceite se absorbe muy bien, no huele y no deja rastro. ¿Qué más queréis para la elasticidad de vuestra piel, mamis?
Luego también tenéis la crema de prevención de anti-estrías blanquita que huele como el resto de la gama, así como a rosa, a mi parecer. Aún siendo espesa, se absorbe fácilmente y a mí también me gusta mucho. Intento usar ésta de día y el aceite de noche cada día del embarazo básicamente. Con esto no os voy a asegurar milagros pues esto depende, en realidad, de la calidad de vuestra piel y la mía es una caca, pero de lo que estoy segura es de que si no me cuidara con productos como éstos, mi tripa estaría incluso peor, si cabe.
Para el busto (ese gran olvidado), Mustela tiene este sérum de firmeza de color rosita que se extiende muy fácilmente y que se puede usar, al igual que todos sus productos de la gama de maternidad, tanto durante el embarazo como durante la lactancia materna, lo cual es un gran alivio porque hay tantísimos productos que no se pueden usar en estas épocas que para mí constituyen los últimos 8 años y medio de mi vida…
Para tratar la firmeza corporal que tiende a desfigurarse estos meses, está este gel transparente tirando a rosado, para reafirmar piernas y zonas rebeldes como el culete, por ejemplo.
Por último , para hidratar la piel que tiende a crecer tanto (sobre todo la tripa) y eso causa mucho picor en algunos casos, este bálsamo hidratante y calmante es perfecto.
Como todos los productos de Mustela, sobra decir que no contiene parabenos, ftalatos ni fenoxyethanol y es hipoalergénico. A mí de embarazada la piel me reacciona mucho más. A veces, simplemente con una ducha de agua demasiado caliente, se me pone la piel súper roja, me pica y hasta se me hincha un poco así porque sí, de modo que es importante usar productos que no la irriten en absoluto como los de esta casa que os estoy hablando hoy en la que yo confío plenamente.
¿Cómo cuidáis vosotras vuestra piel durante el embarazo o lactancia?
